La presidenta de México, Claudia Sheinbaum Pardo, ha reafirmado la postura de su gobierno respecto a Ismael «El Mayo» Zambada, destacado líder del Cártel de Sinaloa. En declaraciones recientes, Sheinbaum enfatizó que su administración no brinda protección a delincuentes y que Zambada deberá enfrentar la justicia conforme a la ley.
Estas declaraciones surgen en respuesta a rumores que sugieren una supuesta protección gubernamental hacia Zambada. La presidenta desmintió categóricamente dichas afirmaciones, subrayando que «El Mayo» tiene órdenes de aprehensión vigentes en México. Además, destacó que cualquier solicitud de apoyo consular, como la presentada por Zambada, se maneja bajo protocolos diplomáticos estándar, garantizando el debido proceso sin implicar impunidad.
La captura de Zambada en julio pasado, tras ser traicionado por antiguos aliados, ha generado tensiones diplomáticas entre México y Estados Unidos. El narcotraficante fue trasladado a territorio estadounidense, donde enfrenta cargos que podrían conllevar la pena de muerte. Ante esta situación, el gobierno mexicano ha enfatizado su compromiso con la soberanía nacional y ha manifestado su desacuerdo con la designación unilateral de los cárteles mexicanos como organizaciones terroristas por parte de Estados Unidos. Sheinbaum ha reiterado que la relación bilateral debe basarse en colaboración y respeto mutuo, sin injerencias externas.
En el ámbito interno, la administración de Sheinbaum ha intensificado sus esfuerzos para combatir al crimen organizado. Se han implementado reformas constitucionales para endurecer las penas contra el tráfico de armas y limitar la intervención de agencias extranjeras en asuntos de seguridad nacional. Estas acciones reflejan la determinación del gobierno por fortalecer la seguridad interna y garantizar que ningún delincuente, independientemente de su influencia, evada la justicia.
La situación de «El Mayo» Zambada continúa siendo un tema delicado en la agenda política y diplomática de México. Mientras se desarrollan los procesos legales correspondientes, el gobierno de Sheinbaum mantiene su postura firme de no ceder ante amenazas ni chantajes, reafirmando su compromiso con el estado de derecho y la justicia.