Desde su llegada a la presidencia de México, Claudia Sheinbaum ha puesto sobre la mesa una serie de iniciativas que buscan atender los problemas más urgentes en el país. Ciudad Juárez, una de las ciudades más importantes de la frontera norte, ha sido mencionada en su agenda, particularmente en temas de seguridad, educación y desarrollo social. Sin embargo, la gran pregunta sigue en el aire: ¿serán estas medidas suficientes para transformar la realidad de la ciudad o solo forman parte del discurso tradicional de cada administración?
Uno de los anuncios más recientes y llamativos es la creación de 12 nuevos Centros de Educación y Cuidado Infantil (CECI), una estrategia enfocada en brindar espacios seguros y educativos para los hijos de las mujeres trabajadoras, especialmente aquellas empleadas en la industria maquiladora. Este proyecto, operado por el IMSS en colaboración con empresas y el DIF, tiene la intención de ofrecer una solución concreta a una de las demandas históricas de las trabajadoras de la región. Con una fecha de inicio de construcción programada para abril de 2025 y una apertura estimada en octubre del mismo año, el reto ahora es garantizar que estos centros no solo se construyan, sino que funcionen con la capacidad y el personal adecuados.
Mientras tanto, la seguridad sigue siendo un tema de alta prioridad para la ciudad. Juárez es una de las 10 urbes más violentas de México y Sheinbaum ha anunciado un plan nacional para reducir homicidios y debilitar el control de los grupos del crimen organizado. La estrategia busca replicar los resultados que obtuvo en la Ciudad de México, donde logró disminuir los asesinatos durante su gestión como jefa de Gobierno. Su plan se basa en el fortalecimiento de la inteligencia policial y la cooperación con agencias de seguridad estadounidenses, además de abordar el tráfico de fentanilo, un problema que se ha vuelto clave en la agenda bilateral con EE.UU.
No obstante, en una ciudad donde la violencia es una constante, las promesas de cada nuevo gobierno suelen ser recibidas con escepticismo. Las estrategias de seguridad que dependen de la cooperación con Estados Unidos han demostrado ser volátiles y sujetas a cambios en la política exterior del país vecino. Además, la militarización de la seguridad pública, implementada por el gobierno de AMLO y ahora continuada por Sheinbaum, sigue siendo un tema de debate en cuanto a su efectividad real.
A nivel político, la victoria de Claudia Sheinbaum en las elecciones de 2024 marcó un hito histórico al convertirse en la primera mujer en gobernar México. Su llegada al poder simboliza un cambio generacional y de perspectiva dentro de la política nacional. Sin embargo, los juarenses han aprendido a no confiar únicamente en los discursos de renovación. La relación entre el gobierno federal y Ciudad Juárez ha estado marcada por periodos de abandono y falta de inversión real en infraestructura y bienestar social.
La clave para la administración de Sheinbaum será demostrar que estas iniciativas no son solo promesas de campaña, sino compromisos tangibles que cambiarán la vida de los habitantes de Ciudad Juárez. Con retos enormes en seguridad, movilidad, empleo y condiciones sociales, el tiempo será el único juez de si su gobierno realmente traerá una transformación o si Juárez seguirá esperando soluciones que nunca llegan.