La senadora morenista Andrea Chávez desestimó las denuncias presentadas en su contra por el Partido Acción Nacional, asegurando que, como en ocasiones anteriores, las vencerá “como siempre lo hemos hecho”.
En una publicación hecha en su cuenta oficial de Facebook, Chávez se refirió a los señalamientos por el uso de su imagen en ambulancias y consultorios médicos del programa “Clínicas del Bienestar”, acusando al PAN de estar en “crisis ética, política y electoral”, y de utilizar recursos para perseguirla judicialmente en lugar de mejorar la vida de los chihuahuenses.
“Ante su evidente derrota política y moral, el PAN deposita sus esperanzas en fallidos procesos judiciales”, escribió, para luego rematar: “Si el dinero y el esfuerzo que el PAN de Chihuahua destina a perseguirme jurídicamente (con poco éxito), lo utilizara para mejorar la vida de los chihuahuenses […] no estarían en la crisis en la que se encuentran”.
Sin embargo, su mensaje no menciona en ningún momento si retirará o no su imagen de los espacios señalados, como ya ordenó el Instituto Estatal Electoral. Tampoco aclara la naturaleza del vínculo entre los servicios médicos móviles y su figura política, a pesar de las denuncias documentadas por medios como Latinus y las quejas formalizadas ante autoridades estatales y federales.
Mientras tanto, el PAN insiste en que Chávez ha violado la ley al hacer uso indebido de recursos públicos y al mantener una campaña anticipada disfrazada de labor social, particularmente en zonas serranas. La Fiscalía General de la República ha abierto una investigación sobre el caso.
En Morena, nadie ha salido a defenderla abiertamente. Ni Claudia Sheinbaum ni otros actores federales han respaldado su versión de los hechos, lo cual deja abierta la pregunta: ¿defiende su inocencia o presume inmunidad?
Por lo pronto, lo único claro es que la senadora no piensa recular, aunque las instituciones comienzan a moverse. Y con ellas, también los silencios.